12vo. Congreso Internacional de Educación Superior Universidad 2020

X Taller Internacional

Por una nueva agenda en materia de evaluación de la calidad y acreditación en la educación superior

La Habana, Cuba, 11 de febrero de 2020.- A poner en marcha los trabajos del Décimo Taller Internacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación en la Educación Superior, el maestro Alejandro Miranda Ayala, director general del Consejo para la Acreditación de la Educación Superior (COPAES) y presidente de la Red Iberoamericana para el Aseguramiento de la Calidad de La Educación Superior (RIACES), expresó que este encuentro internacional es un espacio privilegiado para formar, constituir y consolidar capacidades institucionales; para fomentar la cooperación y estrechar esa fraternidad inquebrantable que nos une y define como Iberoamericanos, pero fundamentalmente es un espacio nos han permitido generar acciones y proyectos conjuntos de investigación, de movilidad y de colaboración eficaces.

En el marco del 12vo. Congreso Internacional de Educación Superior Universidad 2020, que en esta ocasión se celebra bajo el lema “La Universidad y la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible” refirió el maestro Miranda Ayala que estamos inmersos en los procesos transformadores y vertiginosos de la Sociedad del Aprendizaje, y “reconocemos que nuestro futuro depende cada vez más de los esfuerzos que hacemos hoy para consolidar nuestros sistemas y nuestros mecanismos de aseguramiento de la calidad de la educación superior”.

En este sentido consideró que el Décimo Taller es propicio para dar continuidad y seguimiento al avance de los trabajos previos “nodos de aprendizaje”, para definir la nueva agenda en materia de acreditación y aseguramiento de la calidad, y para delinear los nuevos caminos que nos falta por andar.

Planteó que se busca que la educación superior iberoamericana sea dinámica, flexible y disruptiva; que forme a los jóvenes no como repetidores de datos, sino como mejores personas que sean capaces de dar respuesta a las preguntas que tanto nos aquejan, pero que a su vez también formulen nuevas preguntas para impulsar el desarrollo de la humanidad. Parafraseando a Robert Solow, expresó que el verdadero desarrollo de las naciones no está en la acumulación de capital, está en el aprendizaje de cómo hacer mejor las cosas para impulsar descubrimientos trascendentales.

Referente a los Objetivos para el Desarrollo Sostenible (ODS) que se encuentran contenidos en la Agenda 2030 que acordaron impulsar los países miembros de la ONU y que son motivo del 12vo. Congreso Internacional de Educación Superior Universidad 2020, recordó que la Meta 4.3 busca promover la ampliación de oportunidades y el acceso a la educación superior en condiciones de igualdad para todos los hombres y todas las mujeres, a una formación técnica, profesional y superior de calidad.

Precisó que la hoja de ruta para la implementación del ODS 4, constituida por el Marco de Acción Educación 2030, se basa en dos pilares fundamentales: a) la promoción y seguimiento de oportunidades de aprendizaje, y b) la atención a personas excluidas.

Tomando como referencia los últimos resultados de la prueba PISA —que se aplica a jóvenes de 15 años, pero que impacta en la educación superior— manifestó que en la región iberoamericana el aprendizaje es insuficiente, desigual e inadecuado y esto ha comenzado a tener efectos en la gobernanza de los sistemas educativos a nivel mundial, en la definición de sus objetivos estratégicos y en la de las metas de impacto en todos los niveles educativos.

El Presidente de la RIACES fue contundente al expresar que la calidad es la otra cara de la moneda de la equidad, en un contexto en el que se ensancha la brecha entre el ritmo de los cambios que impulsan las Instituciones de Educación Superior en Iberoamérica y los mecanismos gubernamentales con que se cuenta para asegurar la calidad de la Educación Superior. Por ello, es imperativo fortalecer a las instancias para el aseguramiento de la calidad de la educación superior e impulsar la labor que realizan los mecanismos regionales, como la propia RIACES.

Dijo que miramos con impaciencia hacia el horizonte que denominamos “excelencia” para lo cual refirió a la necesidad de asegurar las bases para la mejora continua; diseñar programas educativos flexibles, dinámicos y pertinentes, y consolidar el prestigio de las Instituciones de Educación Superior.

También planteó que para que la acreditación no sea inequitativa ni forzada, debemos prescribir modelos diferenciados de acreditación y de exigencias de aprendizaje que atiendan las particularidades de cada programa educativo, las características de las IES y la región en que actúan.

Debemos, también, revisar las prácticas y adoptar, con su respectiva contextualización, aquellas que sean mejores; definir estructuras orgánicas donde los flujos sean inmediatos, causales y eficientes; impulsar la toma de decisiones basada en evidencia; fomentar la rendición de cuentas y, muy importante, establecer estándares y criterios mínimos de calidad para la región que permitan la armonización de nuestros sistemas de acreditación y garanticen el mejor porvenir para los jóvenes.

En otro momento de su intervención felicitó a la Junta de Acreditación Nacional de Cuba (JAN), en particular a su Secretaria Ejecutiva, Dra. Marcia Noda Hernández, que al cumplir el vigésimo aniversario representan la concreción de la suma de esfuerzos en favor de la mejor de las causas: la educación superior de calidad; “son un ejemplo, subrayó, de lo que se puede hacer en favor de la promoción y del fomento de la calidad educativa y se han erigido como pieza clave en la construcción de las estrategias educativas que habrán de impactar en el porvenir de Cuba”.

Como parte de taller, participaron como conferenciantes miembros de la RIACES María José Lemaitre, directora del Centro Interuniversitario de Desarrollo (CINDA), de Chile, así como Marcia Mercedes Vargas, de la Agencia Centroamericana de Acreditación de Programas de Arquitectura y de Ingeniería (ACAAI), de Panamá, que se refirieron a las experiencias de aprendizaje sobre las Orientaciones de Buenas Prácticas de la RIACES, para, de manera colaborativa, identificar cuáles son las fortalezas y cuáles las áreas de oportunidad que deben robustecerse y consolidar, así como la agenda estratégica en la educación superior como: “La dimensión internacional de la calidad”, “La evaluación y acreditación de programas a distancia”, y “La homologación de títulos”.